La representante del Comité de Víctimas de la Guarimba y del Golpe Continuado, Zoraida Bravo, cuyo hijo perdió la vida hace un año y medio en disturbios callejeros en los que hubo un total de 43 muertes, dijo que la Eurocámara “puede contribuir a evitar que ocurran más situaciones de violencia” en Venezuela.
La subcomisión de Derechos
Humanos del Parlamento Europeo pidió hoy a la Unión Europea que “pase a la
acción” para resolver “la crisis humanitaria” de Venezuela y que “ayude” a los
presos políticos europeos que permanecen detenidos en el país. EFE
La eurodiputada del grupo liberal
ALDE Beatriz Becerra, vicepresidenta de esta subcomisión, denunció que el
gobierno de Nicolás Maduro lleva a cabo “detenciones arbitrarias” y “se niega a
reconocer una crisis humanitaria que impide la llegada de ayuda desde el
exterior”.
“Esta actitud del gobierno está
sumiendo a la población en una situación de absoluto desamparo. Hay que pasar
de la preocupación a la acción desde las instituciones europeas y ayudar a
nuestros compatriotas detenidos en Venezuela”, afirmó.
La directora ejecutiva del
Instituto Casla de Praga y coordinadora internacional del Foro Penal
Venezolano, Tamara Suju, invitada al debate, denunció un total de 2.300
arrestos por motivos políticos en Venezuela “en los últimos cinco meses”.
De esa cifra de personas
arrestadas, subrayó, 24 están condenadas y 77 detenidas por procesos judiciales
pendientes. Por otro lado, dijo que “un total de 2.055 personas arrestadas en
los últimos dos años siguen teniendo procesos penales abiertos”.
Por su parte, la presidenta de
VenEuropa, Patricia Betancourt, denunció los casos de diez personas repartidas
en distintas cárceles “que comparten con el resto de presos políticos las
mismas ilegalidades y condiciones inhumanas”, entre ellas cuatro españoles.
“Venimos a pedir que ustedes
hagan lo que esté a su alcance para conocer la situación en la que se
encuentran estos europeos”, afirmó.
Betancourt pidió que “se active”
una delegación de eurodiputados “que viaje lo antes posible a Venezuela e
incluya en la visita a los presos políticos europeos”, después de que el pasado
diciembre la Eurocámara anulara una misión de observación electoral.
La representante del Comité de
Víctimas de la Guarimba y del Golpe Continuado, Zoraida Bravo, cuyo hijo perdió
la vida hace un año y medio en disturbios callejeros en los que hubo un total
de 43 muertes, dijo que la Eurocámara “puede contribuir a evitar que ocurran
más situaciones de violencia” en Venezuela.
“Queremos pedir a este Parlamento
que contribuya con la labor que hacen nuestras organizaciones, que no haya
impunidad y se sancione a los responsables”, afirmó.
El eurodiputado del PP Luis de
Grandes denunció “el proceso de deriva totalitario del régimen de Maduro, que
está bordeando el riesgo de una represión sin límites”, mientras que Teresa
Jiménez-Becerril, del mismo partido, puso el acento “en el apoyo a las
víctimas”.
Por parte de Izquierda Unida,
Javier Couso denunció “una oposición violenta” y dijo que la ONU ha ratificado
que Venezuela es “un país garante y respetuoso de los derechos humanos”.
Couso abogó por “otro rol” de la
UE, que apueste por “apoyar a las víctimas del terrorismo callejero, el respeto
de la institucionalidad venezolana y la misión de Unasur”, la Unión de Naciones
Suramericanas.
Fuente: El Nacional Web