El joven Juan Pernalete fue asesinado por una bomba lacrimógena "disparada por la Guardia Nacional", confirmó la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, desmintiendo así al ministro de Interior y Justicia, Néstor Reverol, quien aseguró hace semanas que el estudiante de la Universidad Metropolitana había muerto por el impacto de una pistola de perno.
En rueda de prensa, la Fiscal anunció que las investigaciones realizadas por el Ministerio Público determinaron que la muerte de Pernalete se produjo "por un schok cardiogénico" tras un traumatismo en el pecho.
"Esto lo impacta... es una bomba lacrimógena sí. Nosotros llegamos a la conclusión luego de una serie de experticias sobre el cadáver de este joven estudiante, una inspección técnica, no solo la autopsia sino la inspección técnica del cadáver, levantamiento planímetro del sitio del suceso, la versión de los testigos; tenemos cinco testigos en este caso; acoplamiento técnico de las dimensiones del cartucho con la lesión que tuvo en el tórax, la presencia de residuos en la franela, análisis histológicos, químicos, toxicológicos, hematológicos, todas las experticias", dijo.
Ortega Díaz mostró a los periodistas presentes en la Escuela Nacional de Fiscales el cartucho con que fue impactado Pernalete y leyó las advertencias de su uso: "Se prohíbe dispararlo directamente a las personas", dijo al reconocer que el disparo de una lacrimógena podría resultar letal por su peso. "Yo creo que con esa fuerza es capaz de producir la muerte".
Confirmó que la bomba lacrimógena fue disparada por la Guardia Nacional. "Sabemos del grupo de donde salió este objeto, pero no hemos individualizado a la persona, esperamos en los próximos días identificar a quien disparo este objeto".
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