Al “vicepresidente” de la República no le basta con robarse la plata de los ministerios, alcaldías y/o gobernaciones en donde alguna vez trabajó, sino que también tiene que expandir sus redes hacia los negocios más deplorables de la humanidad. Como hemos mencionado aquí anteriormente, seguramente la corrupción de Estado no abarca lo suficiente para estas insaciables almas avariciosas, y deben volcarse hacia un narco-Estado.
Ahora la nueva es que Tareck El Aissami aparece vinculado al poderoso político y ex guerrillero salvadoreño del FMLN, José Luis Merino, conocido anteriormente como el “Comandante Ramiro” durante la guerra civil de El Salvador. Fuentes aseguran que Merino es asesor de las FARC y está encargado de manejar una parte de las finanzas de este grupo. Además, desde el 2006, está ligado a Alba Petróleo, aquella organización creada por el propio Chávez, lo que le ha permitido obtener incontables beneficios económicos y una amplia influencia en la región.
La conexión entre estos dos capos del narcotráfico en la región aparentemente es a través de una poderosa estructura que le ha permitido a Merino y a El Aissami, lavar millones de dólares provenientes del narcotráfico, contrabando de oro, combustibles y otros fondos de origen ilegal, conforme a un informe de inteligencia elaborado por agentes federales estadounidenses, y no olvidemos cómo estos le tienen el ojo encima a este sin vergüenza corrupto, que ya fue sancionado por la OFAC haces unos meses por sus implicaciones en el narcotráfico internacional, él junto con su testaferro Samark López, a quienes además les congelaron todos los bienes y activos que poseían en suelo estadounidense.
De acuerdo con un reportaje realizado por Maibort Petit, la investigación se enmarcó entre los años 2009 y 2015, y tenía como objetivo revelar los movimientos de dinero de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el sistema financiero internacional. Lo que no esperaban los funcionarios que realizaban las averiguaciones era toparse con el vicepresidente de la República Bolivariana de Venezuela, Tareck El Aissami y sus socios.
Lo cierto es que la investigación señala que Merino estuvo (o está) ligado a varias empresas financieras que por años han facilitado el lavado de dinero provenientes de las FARC. Estas instituciones bancarias asociadas a Merino están muchas de ellas ubicadas en Centroamérica, incluyendo a algunas de gran renombre, pero cuyos nombres no son revelados por ahora y solo parece uno cifrado con las siglas PR-AMPAM. Pero el picante del asunto en esta investigación, es que estas empresas financieras también han ayudado a blanquear capitales provenientes de corporaciones vinculadas con El Aissami. Todo queda entre familia… la familia del narcotráfico latinoamericano.
Añadido a todo lo anterior, el informe también señala que el vicepresidente “El Aissami, a través de asociados, maneja en Panamá una empresa de nombre Yakima Trading Corporation, que es un holding que controla otra empresa con el mismo nombre en Inglaterra”. Continúa explicando que, “a través de esas empresas se manejan inversiones petroleras que se hacen en el mercado internacional, y a su vez, realizan lavado de dinero proveniente de la empresa criminal”.
Asimismo, la investigación revela que las empresas ligadas al poderoso político venezolano mantienen su dinero en bancos panameños, utilizando los servicios referidos por Merino y sus socios. El informe asegura que, entre las instituciones financieras usadas por el grupo en Panamá, está el banco St. Georges Bank. Afirman que esta entidad bancaria es utilizada por las empresas ligadas al El Aissami para manejar sus recursos, pero no es seguro que tenga una participación directa en el esquema o que tenga conocimiento del sistema. Solo se detalla el uso de los servicios para hacer transacciones fraudulentas.
Ahora a continuación les presentamos las entidades y los esquemas de corrupción que se han tranzado estos dos capos de la región, Merino y El Aissami:
Mossack-Fonseca: El informe asegura que tanto Merino como El Aissami y otros socios, usaron los servicios legales del abogado Ramón Fonseca Mora, fundador del bufete jurídico Mossack-Fonseca, firma implicada en el escándalo de corrupción de los “Papeles de Panamá” o “Panama Papers”.
Además, Fonseca Mora fue arrestado provisionalmente el 10 de febrero de 2017 junto con Jurgen Mossack, por estar presuntamente su despacho involucrado en el otro mega escándalo regional, Operación Lava Jato de Brasil, mejor conocido por los venezolanos por la participación de Odebrecht y los estrechos lazos de esta empresa brasilera con altos funcionarios del Gobierno como Diosdado Cabello.
Fonseca habría colaborado con los investigados -Merino y El Aissami- en el manejo legal para las inversiones millonarias de bienes inmuebles y otros negocios en Panamá. El reporte señala: “las inversiones sugieren la utilización del sistema financiero panameño y centroamericano para lavar activos provenientes de las FARC”. Agrega además que, “la estructura organizada por Merino y sus asociados ayuda en el lavado de dinero de otras organizaciones criminales como Las Maras de Centroamérica y cárteles de droga sudamericanos, incluyendo el cartel de Los Soles, además de recursos ilícitos de funcionarios civiles y militares del gobierno de Venezuela, muchos de los cuales ya han sido investigados por las autoridades federales de los Estados Unidos.”
En La Habana: La investigación también hace referencia a unas supuestas conversaciones que se llevaron a cabo en La Habana, Cuba, entre los años 2012 y 2014, durante las negociaciones con las FARC pero previas al acuerdo con el gobierno colombiano. Según el reporte, “Merino habría ofrecido facilitar el movimiento de dinero del grupo terrorista hacia los bancos asociados y el supuesto traslado de lingotes de oro que las FARC obtienen de la minería ilegal en Colombia”. Esta operación además la realizaban a través de una refinadora de nombre Kaloti, localizada cerca del Aeropuerto Internacional Johan Adolf Pengel, en Surinam. “Allí llega el otro a través de Venezuela para ser refinado posteriormente depositado en los bancos asociados a Merino”, dice el reporte.
En el informe se hace referencia a un supuesto asociado a Tareck El Aissami en Panamá y Centroamérica, Pedro Luis Martín Olivares, ex jefe de inteligencia financiera de la policía secreta de Venezuela en el gobierno del fallecido Hugo Chávez”. La policía de Estados Unidos considera a Martín Olivares como un actor importante en la floreciente industria del narcotráfico en Venezuela. Adicionalmente, se sospecha que Martín es un enlace clave entre los narcotraficantes y altos funcionarios militares de Venezuela, de los servicios de seguridad y del Gobierno que protegen el comercio ilegal de drogas y que es el principal gestor financiero en el lavado los ingresos por narcotráfico de los altos funcionarios venezolanos.
Y no se vayan muy lejos que en un próximo artículo, les traeremos las demás empresas y negocios turbulentos en el que estos dos delincuentes (El Aissami y Merino) se siguen cocinando sus guisos para continuar lucrándose, mientras ven al pueblo venezolano pasar hambre y trabajo, o ver cómo nos matan en las calles ejerciendo nuestro legítimo derecho a la protesta.
loading...
Publicar un comentario