Cada vez es más caro comprar el pan nuestro de cada día. El tipo campesino o gallego cuesta 3.000 bolívares cada barra en las panaderías de Chacao. Comprar 4 ala semana implica un gasto de 48.000 bolívares mensuales. En enero de este año, estos mismos panes costaban 600 bolívares lo que significa un incremento de 400%.
A pesar de que la arepa es otra de las alternativas para desayunos y cenas en la mesa del venezolano, el pan continúa siendo una opción preferente entre los consumidores, que aseguran que compran entre tres y cuatro panes a la semana.
El precio de la canilla aumentó 233%. Desde enero pasó de costar 150 bolívares a 500 bolívares. Ayer vendieron 2 unidades por 1.000 bolívares y 4 por 2.000 bolívares en una panadería de la misma zona. Un trabajador aseguró que llegó harina de trigo la semana pasada, aunque no ha sido regular la distribución del indispensable insumo.
El pan de sándwich también aumentó de precio. Un paquete con 20 piezas cuesta entre 8.800 y 10.500, si no tiene otros ingredientes como cereales o frutas, cuando en febrero de este año tenía un precio de 3.400 bolívares, lo cual equivale a un alza de 159%.
Los consumidores compran pan de sándwich cuando no logran la proeza de adquirir las barras en las panaderías. Los altos costos y la continua escasez de la harina de trigo en los establecimientos mantienen como una constante las dificultades para adquirir el producto. La irregularidad en la llegada de harina a las panaderías sigue siendo la causa de las colas.
“Esta es la tercera cola que hago hoy. Esta situación me hace sentir frustrada, triste y decepcionada porque no es justo que uno tenga que pasar por esto”, lamentó una consumidora que esperaba desde hacía media hora para comprar pan francés en Chacao. Dijo que vive en El Valle, donde es más complicado conseguirlo: “Las personas deben estar en los establecimientos a las 5:00 am si quieren comprarlo”. En esta panadería no reciben harina desde hace 3 semanas, aseguró un empleado. “Antes llegaba cada 15 días”, dijo.
En otro local, también en Chacao, algunos consumidores pudieron comprar pan gallego a 3.000 bolívares, 2 unidades por persona. Un trabajador aseguró que la harina llegó hace una semana: la única vez en agosto. “Teníamos tiempo sin sacar pan”, dijo.
Pero hacer una cola no garantiza que todos los consumidores puedan comprar. La cantidad que las panaderías tienen disponibles por día no es suficiente para satisfacer la demanda.
Así sucedió ayer en este mismo establecimiento. Anunciaron que se acabó el pan cuando aún quedaba un grupo de personas esperando, entre ellas una consumidora que contó que puede pasar más de una hora en una cola. Aseguró que las tres piezas que compra a la semana no alcanzan para las cinco personas que viven en su hogar. “Estoy cansada y obstinada de esta situación”, manifestó.
En Los Cortijos un pan campesino cuesta 3.500 bolívares y en La California Norte la misma pieza vale 4.500.
En una panadería en la avenida Baralt se acabó la harina de trigo. No saben cuándo los volverán proveer. Les quedaba pan andino a 5.500 bolívares, de sándwich elaborado por ellos a 8.500 bolívares, y de marca desde 8.800 bolívares.
El Nacional